Me encanta que a veces seas mi confidente y compañero.
Me gusta que me entretengas en esos momentos de soledad.
Incluso agradezco que a través de ti;
pueda llegar a compartir, sentir, reír, y llorar,
con algunas de las tantas emociones que me ofreces, a través de tu ventana.
Pero prometo, recordarme siempre valorando el instante de mi vida.
Saber reconocer quien está al servicio de quien cuando te tenga en mis manos.
Para no consentir jamás, que en compañía de otras personas, que aprecien y requieran de mi presencia, mi respeto, mi atención, y mi mirada.
"Tenga que verme obligad@ a agachar la cabeza por ti".
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